El origen del flamenco en Andalucía sigue siendo una incógnita debido a las múltiples culturas que existían en esta comunidad autónoma. Su desarrollo a lo largo y ancho de Andalucía tiene múltiples orígenes descritos, entre ellos la Zambra del Sacromonte, Zambra morisca o La Zambra gitana, que hoy día es parte capital de la cultura del flamenco. Vamos a intentar dejar claro el concepto, su origen y desarrollo a lo largo de este post.
Como ya sabemos, la cultura gitana no es la única que ha tenido lugar en Granada, y de la misma forma, la cultura árabe ha aportado algunas costumbres, entre ellas, la zambra. La zambra mora es el resultado de las variaciones en danzas moriscas, danzas inspiradas en los árabes. Los moriscos fueron los musulmanes del al-Ándalus.
La palabra Zambra se puede relacionar con dos palabras árabes, como es la zamra (tocata) o del árabe tradicional zamara (músicos). La zambra gitana, como su nombre indica, es un baile desarrollado principalmente por la raza gitana en las cuevas del Sacromonte en Granada y en las cuevas de Almería.
Durante la estancia de los gitanos en las cuevas del Sacromonte, su máxima expresión era el flamenco, además de su principal fuente de ingresos, ya que mantenían entretenidos a peregrinos y traspasaban estos bailes e inspiración de generación en generación.
El barrio del Sacromonte consiguió su máximo esplendor durante los años 60, donde la mayor parte de su población manejaba el cante, el baile o instrumentos. La zambra gitana proveniente de la zambra morisca, surge como la fusión de tres bailes que representaban un momento diferente durante una misma boda gitana: la cachucha, la mosca y la alboreá.
Algunos de los elementos característicos de estos bailes eran: se bailaba con pies descalzos, en la parte de arriba una camisa blanca atada debajo del pecho y en la parte de abajo una falda con amplios pliegues y atada en la cadera.
La historia de la Zambra Gitana se detuvo durante la Inquisición del siglo XVI, donde se prohibió al ser considerada una danza indigna. A partir del siglo XIX el flamenco comenzó a tomar importancia como arte musical, y los gitanos del Sacromonte siempre aparecían reflejados por los escritores románticos.
Los denominados viajeros románticos imaginaban a los gitanos cantando y bailando flamenco, y se acentúa tanto esta imagen sobre ellos que comenzaron a hacer estos bailes para los turistas con el vestido de flamenco. Fue en este momento cuando las cuevas del Sacromonte pasaron a ser un símbolo en la cultura española.
El Ayuntamiento de Granada empezó en febrero del 2019 los trámites con el objetivo de que la UNESCO considere a la zambra gitana Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Fueron un vital apoyo las zambras activas en ese momento, como: Venta del Gallo, Los Tarantos, La Rocío, María La Canastera y otras figuras muy importantes del flamenco.
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